

Las bajas temperaturas han llegado más pronto de lo que esperabas, y probablemente, más de un desprevenido no ha logrado hacer la concerniente revisión al sistema de calefacción de su casa. Si eres de los que debe hacer ajustes, aún estás a tiempo de ir revisando las instalaciones de casa y contactar a los expertos.
¿Estabas preparado para el adelanto de las bajas temperaturas? ¿Tenías todo listo en casa para no pasar días enteros de frío? Si tu respuesta es no, y el frío te agarró por sorpresa, no te preocupes, aún estás a tiempo de hacer ajustes de último momento al sistema de calefacción, en cualquier parte de la casa. Si tu prioridad es el baño toma en cuenta estos consejos prácticos antes de iniciar una revisión.
Si es verdad que en el exterior el frío te congela, haz todo lo posible para que esto no ocurra dentro de tu casa. Optimiza los sistemas de calefacción en cada una de las áreas, pasando por el salón, los dormitorios, los baños, la cocina, entre otras. De todas estas antes mencionadas, cobra especial atención el baño, pues es uno de los puntos que hace más vulnerables hace a las personas.
Los baños hacen vulnerables a las personas, pues las exponen a cambios drásticos de temperatura. Tomar una ducha caliente y salir a un clima frío, te puede asegurar un catarro en grandes proporciones, pero para evitarlo debes contar con un sistema de calefacción ideal, que en ocasiones puede requerir una inversión un poco mayor al resto de la casa. Elegir el sistema de calefacción para un baño puede suponer un poco más de dedicación, por eso toma nota de estos consejos:
Usa calefacción eléctrica. Es el sistema más recomendado para los baños. Aunque pueda generar un poco de miedo la idea de mezclar agua y electricidad, no te preocupes. Actualmente los sistemas de calefacción eléctrica son lo suficientemente seguros como para instalarlos en los baños u otra parte de la casa.
La calefacción central no es suficiente. En ocasiones podemos pensar que el sistema central de calefacción es el ideal y lo suficientemente potente, pero la realidad puede dibujarnos un escenario muy distinto y, literalmente, frío.
Sin butano, ni parafinas. Los sistemas de calefacción a base de butano o parafina no están recomendados para los baños por tratarse de espacios pequeños y cerrados, cuya ventilación en invierno es muy reducida. Estos sistemas necesitarán oxigeno para funcionar de manera óptima y en un baño no se dispone del suficiente. Aún así, la decisión debes tomarla con el experto que te visite en casa.
Calefacción tipo mural. Son eléctricos y uno de los más seguros para el baño, pues al estar instalados en la pared se reduce el riesgo de sufrir algún accidente doméstico; aunque su uso quedará condenado exclusivamente para el baño, pues su sistema de instalación es trabajoso.
Evita las estufas de suelo. Este tipo de estufas, aunque pueden ser muy usables y prácticas, suponen un riesgo para los baños, pues al estar en el suelo, corren el riesgo de entrar en contacto con el agua, con lo cual puede generar algún accidente en casa o se pueden deteriorar.
Estufas y accesorios. El diseño industrial nos ofrece cada día sistemas de calefacción más cómodas de usar e incluso con otras funciones; como por ejemplo, los toalleros eléctricos. Estos se cuelgan en la pared sin mayor sistema de instalación y calienta sus barras para optimizar el clima del baño.