¿Sabías que no solo el qué cocinemos es importante para nuestra salud… y para nuestro bolsillo? También es muy importante el “cómo” lo hagamos. Cocinar con gas natural está repleto de ventajas y a todos los niveles. A groso modo estas son las cinco más importantes que deberías conocer…

Hoy vamos a preparar un rico arroz con pollo. Imagina que plato más sano: carne, cereales, verduras… un plato equilibrado, energético y saludable. Esto sí que es cocinar sano y así debería ser siempre, ¿verdad? Pero ojo, cocinar bien no es solo cocinar una rica alimentación que respete nuestras necesidades en cuanto a vitaminas, proteínas, hierro… también el cómo cocinemos. Cocinar con gas natural esté repleto de ventajas, también para nuestra salud y de forma directa. ¿Cómo? Toma buena nota.

Mejor sensibilidad al calor

La temperatura de cocción es muy importante a la hora de cocinar y a veces no disponemos de mucho tiempo. Además un mal cocinado de los alimentos o que estén crudos por algunas partes no es el todo sano. Cocinar con gas natural es disponer de una mayor velocidad en lo que sensibilidad calorífica se refiere. Y es que los quemadores de gas consiguen que la cazuela, sartén o cacerola se caliente antes y de manera más proporcionada.

Eficiencia energética

Pagamos lo que consumimos, ni más ni menos. El gas natural permite una mejor eficiencia energética ya que calienta más rápido nuestra cocina y viceversa también la enfría prácticamente el instante. Lograremos una cocina más eficiente y preparada, ahorraremos energía y por tanto dinero.

Mayor durabilidad de los electrodomésticos

Diferentes estudios han comprobado como el gas natural es el mejor aliado para cocinar ya que cuida mejor otros sistemas de cocinado los propios electrodomésticos. ¡Cómo lo oyes! Una de las ventajas de cocinar con gas natural es que nuestros electrodomésticos nos durarán más y nos evitaremos disgustos (ves, otra ventaja para tu salud).

Mejor reparto del calor

Los quemadores del gas natural son centrales, calientan mucho mejor la cacerola y esto hace que los alimentos se cocinen por igual. Un punto importante por ejemplo en patatas o verduras algo más duras que necesitan un mayor tiempo para que salgan bien cocinadas y ricas y no nos quede duro parte del plato. El alimento se cocina de forma uniforme hasta el final.

Cuidas el medioambiente

Otra de las ventajas de cocinar con gas natural es que cuidas el medioambiente ya que se trata de una energía más limpia y respetuosa. El suministro de electricidad requiere de un transporte y unas infraestructuras mucho más invasivas con el entorno.